Entradas

Reseña: La corona de hielo, de Terry Pratchett

Mundodisco_Corona_HIelo.jpg


La pequeña Tiffany ya es adolescente, recorre las casas de las familias del pueblo con la Señorita Traición atendiendo dolencias, aclarando altercados, impartiendo justicia. Tiffany poco a poco comprende que las personas quieren y necesitan eso, que los lleven de la mano por el buen camino, es el método largo y difícil, pero que de otro modo no funciona; no es que los pueblerinos sean tontos, sino que no se detienen a pensar lo suficiente en qué les conviene y qué no.

Una fría noche de invierno la Señorita Traición la lleva a presenciar sigilosamente una danza, una danza que ella había visto antes, cuando era pequeña, era el Baile Morris, llevada de pueblo en pueblo por la Cuadrilla Morris, y que, extrañamente, traía consigo el verano. Tiffany no pudo evitar seguir el ritmo, primero con los pies, luego el resto del cuerpo; hasta que  finalmente se metió en medio de los bailarines a danzar alegremente, sin saber que había bailado ni más ni menos que con el Forjador de Invierno.

Tiffany sin quererlo ni darse cuenta ha conseguido un pretendiente, no uno cualquiera, básicamente deberá enfrentar a una especie de dios que se ha enamorado de ella. Al mismo tiempo, pese a su corta vida, se verá envuelta en una especie de trío amoroso, también deberá encarar sus propios miedos e inseguridades, y como si fuera poco se verá en medio de las luchas de poder entre las brujas más poderosas.

En una situación que me hizo pensar en una leve semejanza a La Cenicienta, el Forjador de Invierno comienza a buscarla por el pueblo y sus alrededores, a su vez decidido a convertirse en hombre para estar con ella. Esto causa estragos en el pueblo, ya que si el Forjador de Invierno se queda, las nevadas también, y con ello los animales y las personas comienzan a sufrir las consecuencias.

La corona de hielo
Autor: Terry Pratchett.
Medio: Electrónico.
Edición: eBook.
Páginas: 180.